Nicolás Cook, alumno de 1º de
bachillerato del IES Margarita Salas, ha querido compartir con nosotros
su reflexión relativa al tema que plantea. Sería interesante
entablar un intercambio de opiniones.
¡Esperamos vuestros comentarios!
Este es su artículo:
La juventud gusta entre la
gente por la espontaneidad con la que se actúa, no se tiene miedo a la hora de
perseguir los sueños y se consiguen más oportunidades para cumplirlos. A su
vez, gusta la ilusión a la hora de
conseguir objetivos, la inocencia, la novedad, todo resulta nuevo. Si hay que
hablar de algún problema en la juventud, el tópico sería la pérdida de seres
queridos, amigos.
De la edad adulta atrae la
madurez con la que se afronta la vida, no nos alarmamos tanto como en la
juventud, se piensa que deberíamos haber vivido la inocencia de la juventud
entrelazada con la madurez adulta, el poder liberarte, en parte, de ese campo de dependencia parental, y por supuesto el
poder ver la evolución y desarrollo de los hijos. Como desventaja de la edad
adulta sobresale la idea del rápido y fugaz paso del tiempo.
En primer lugar, comenzar diciendo que no sé a
ciencia cierta si la juventud es la mejor etapa de la vida, ya que no he vivido
las suficientes experiencias para argumentar qué etapa me resultaría mejor. No
obstante, sí que puedo aventurar una
opinión sobre ello tras la información que he recabado con ayuda de unas encuestas.
La juventud, como todo en la vida, tiene sus
pros y sus contras. En mi opinión, tiene más pros que contras. Sin ir más
lejos, la vida del estudiante es más jovial y ni mucho menos aburrida, en
cambio la del adulto es una rutina: trabajo, casa, dormir y así repetidamente
durante muchos años hasta el punto de querer jubilarse a los treinta y cinco.
Otra ventaja es la diferencia de meses de vacaciones, mientras que para
nosotros son meses, para los adultos son escasas. Más ventajas son, por
ejemplo, poder disfrutar de todo sin tener que preocuparte de nada o de vivir
cada momento, al contrario de los adultos, que generalmente no aprecian esos
detalles escondidos entre los segundos.
Desventajas de la juventud frente a la edad
adulta, hay pocas, pero las hay. Por ejemplo, conducir, conducir es algo que a
cualquier niño le ha fascinado poder hacer. De pequeño, a quién no le
encantaba cuando su padre le decía: “Venga, ayúdame a cambiar de marcha”, eso
era algo fascinante. También una de las mayores ventajas en este mundo es poder
tener un hijo, al cual poder querer, abrazar, cuidar, enseñar y adorar. La
tercera y última ventaja de ser adulto es poder trabajar en algo que te guste,
porque en la etapa de estudiante, excepto en la universidad, te están
impartiendo materias, que pueden gustarte o no, pero poder trabajar en lo que te guste debe ser maravilloso, encantador y enriquecedor.
En cuanto a temas físicos o deportivos se
refiere, ahí gana la juventud. Ya que a parte de tener una
musculatura en crecimiento y con ganas de moverse y hacer ejercicio físico,
tiene la ventaja de que en cualquier momento puede ponerse a correr veinte
minutos sin parar, o hacerse diez flexiones de golpe, a diferencia de los
adultos, si hacen algún tipo de
deporte, este tiene que hacerse en un tiempo contado al segundo y además tiene
que ser en un momento específico del día.
En conclusión, por lo que he vivido hasta
ahora, y después de haber razonado profundamente en el tema, mi respuesta final
es, sí, la juventud es la mejor etapa de la vida.
NICOLÁS COOK MUÑOZ
Me ha encantado tu manera de pensar, antes de haber encontrado tu revista pensaba lo contrario, pero ahora que me la he leído he cambiado totalmente de opinión.
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